La cantante estadounidense Kesha ha sido demandada por DAS Communications, empresa que gestionaba la carrera musical de la joven hasta que esta decidió fichar por Dr. Luke. Ahora, su antigua compañía reclama a la joven el pago de una indemnización millonaria por haber roto su contrato.
Según ha publicado 'Contactmusic', el acuerdo inicial entre Kesha y DAS Communications establecía que la joven, que por aquel entonces aún no era una estrella de la música, cedía a la compañía un 20 por ciento de los beneficios derivados de su actividad. No obstante, el acuerdo contemplaba que el contrato podía ser anulado en caso de que dicha compañía no consiguiera que la joven fichara por una casa discográfica de más renombre en el plazo de un año.
DAS Communications insiste en que, a pesar de no conseguir lo pactado con Kesha (y no alcanzar un acuerdo con una discográfica mayor para la joven en el plazo de un año), su relación siguió siendo buena hasta que esta conoció al productor Dr. Luke, quien, a su juicio, "indujo, intimidó y convenció a la joven" de que rompiera el contrato.
Según su alegato, "a pesar de haber amasado una gran cantidad de dinero en muy poco tiempo y en gran medida gracias a la gestión que DAS ha hecho de su carrera profesional, Kesha podría perder su fortuna de no ser aconsejada por buenos asesores".
"El manager de Kesha desde 2006 era DAS. Había un contrato escrito y trabajaron juntos hasta septiembre de 2008 cuando Dr. Luke, por iniciativa propia, indujo a la joven a romper dicho acuerdo. La cantante terminó de esta forma tan brusca e injustificada la relación con la compañía", ha comentado Ken Freundlich, representante de la empresa demandante.
"Vamos a llevarla a los tribunales y vamos a demostrar que Dr. Luke le indujo a romper un contrato que ella no tenía derecho a terminar y, por ello, vamos a conseguir una indemnización", sentencia.
Por el contrario, Charles Ortner, abogado de Kesha, defiende a su cliente alegando que los abogados de DAS Communication sólo pretenden cobrar una comisión por el trato entre la cantante y RCA/Jive, acuerdo con el que estos primeros representantes no tuvieron nada de ver ya que, para aquel entonces, la vocalista ya había cambiado de manager.
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